Amor propio
El amor propio se escucha como un tema cliché en estos
tiempos, porque todo el mundo está usando esta frase de manera indiscriminada,
la mayoría a su conveniencia, pero el hecho es que está muy de moda él termino.
Especialmente cuando vemos a estas mujeres súper
operadas y a estos hombres llenos de esteroides hablando de aceptación,
autovaloración y amor propio (¡ojo! no tengo nada en contra de esas personas,
cada quien es libre y puede hacer lo que quiere con su cuerpo) pero no vengas a
subir a las redes una foto súper producida en el Gym (a nombre del amor propio) con frases como: ¨con constancia
y perseverancia todo se puede, me amo como soy, gracias Dios! #enfocada #esfuerzo
#disciplina #bendecida #amorpropio¨, etc., ¿Dime? ¡Esa película ni tú te la
crees!
Que me vas hablar tú a mí de amor propio, si no te
aceptas a ti misma, si entras a un quirófano cada vez que quieres y puedes, si
vives quitándole y poniéndole cosas a tu cuerpo porque no te gusta lo que ves
cuando estás frente al espejo, tu que vives para la gente, que no te atreves
hacer tu mismo, a ser diferente, a ser única.
La mayoría de las personas piensan que el amor propio
es un asunto físico, pero no, realmente es un conjunto del todo, pero es más
mental y emocional que otra cosa, porque es la forma en que yo me aprecio, en
que yo me cuido, en que me protejo y en la que me doy amor, que bien puede ser
con actos físicos, pero va mucho más allá que eso, ya que exige una verdadera transformación
interna, es una cuestión de autoestima, de aceptación, de reconocimiento y autovaloración.
Lo importante aquí es que empecemos a tomar conciencia
de cuán valiosos somos, de que somos seres únicos e irrepetibles y de que
nuestro valor no lo determina nuestro aspecto físico y mucho menos la opinión de
los demás al respecto, para que empecemos a darnos amor propio de forma
asertiva.
Podemos empezar con pequeños detalles cómo: comer
saludable, bailar, tocar algún instrumento musical, leer, estudiar, ir al cine,
viajar, artesanía, redecorar, ejercitarte, rutina facial y corporal, comer,
dormir, amar, hacer eso que siempre has querido hacer y nunca te has atrevido,
etc., hay infinidad de cosas que puedes hacer por ti, que reforzarán tu amor
propio (si piensas que es necesario busca ayuda profesional), lo importante es
que identifiques cuál es tu lenguaje del amor, para que puedas llenar tu tanque
emocional, porque si no sientes amor por ti misma nunca podrás dar amor a los demás,
ya que nadie puede dar de lo que carece y a todos nos gusta sentirnos amados.
Lo que si debemos de tener siempre
pendiente es que podemos darnos amor propio con acciones pequeñas, pero hacerlas
porque así lo queremos, por nosotros mismos, no porque nuestra familia, amigos,
trabajo, o la sociedad en general así lo quieren o así esperan que lo hagamos,
recuerda que no estás en este mundo para complacer a nadie, conviértete en tu prioridad
número 1, no permitas que
sea la vida la que pase por ti, vive tu presente y abrázate, dialoga contigo misma, perdónate, haz la paz
contigo misma, amate tal cual eres, dedícate a sentirte bien contigo misma, es
con quien pasaras el resto de tú vida, se feliz y vive, ¡vive carajo!.
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